Hoy os voy a hablar de un tema que os va a encantar.

Es una de las preguntas que más me hacéis en Redes sociales.

Estoy comiendo bien, estoy comiendo menos, además estoy haciendo ejercicio, y sin embargo, no pierdo peso. ¿Qué es lo que pasa? Ésta es la pregunta que más se repite. Hoy os la voy a solucionar, además es muy fácil.

Tenéis que entender que la báscula no es un ser que os tenga manía. La báscula os indica los resultados de lo que estáis haciendo.

Si habéis cogido peso es porque, por las circunstancias que sean, habéis comido más de lo que necesitabais. Y ese exceso de comida se ha acumulado en forma de grasa.

¿Qué hay que hacer ahora para perderlo? Lo que tenemos que conseguir es que vuestro cuerpo necesite energía que no recibe de los alimentos. ¿Y de dónde va a coger nuestro cuerpo esa energía? De la grasa. Para eso, debemos seguir unos pasos.

Comer un poco menos

Por un lado, evidentemente, tendremos que comer menos. Aunque comamos sano, hay que comer menos.  Pero, los alimentos no sólo nos engordan y nos adelgazan, también nos alimentan. No se puede perder peso simplemente dejando de comer.

Hay que comer sano, y hay que comer porciones pequeñas. Si hablamos de cantidades, deben ser pequeñas dentro de unos límites.

Siempre deberás tener tu ración de proteína en cada comida, aproximadamente del tamaño de la palma de tu mano para no perder fuerza muscular. Deberás tener tu ración de verdura, tus dos o tres piezas de fruta al día, y tendrás que reducir, sobre todo, las porciones de hidratos.

Es importante que sean porciones pequeñas en cada comida, es decir poco arroz, poco pan, poca patata, o poca pasta, y sobre todo reducir la grasa con la que cocinas. Que sea grasa sana, como la del aceite de oliva virgen extra, pero poca cantidad, en general, no más de 5 cucharadas al día.

En resumen, necesitas comer menos, y sólo comiendo poco se puede perder peso. ¿Qué ocurre si aunque pierdo peso, no es suficiente, y quiero perder más?. Entonces, no puedes seguir reduciendo lo que comes. Porque no te vas a encontrar bien, te puede producir ansiedad y depresión. Lo que perderás en kilos también lo perderás en salud.

Nuestro cuerpo no está diseñado para perder energía sin motivo. Si recibe más alimento o calorías de las que necesita las va acumulando en forma de grasa.

Lo que tienes que hacer es: si ya estás comiendo poquito, y estás comiendo sano, pero pierdes poco lo que necesitas es gastar más. ¿Y cómo gasta más?

Hacer ejercicio

Moviéndote más. Haciendo ejercicio en tu vida diaria: caminando siempre que sea posible, no cogiendo el coche, no cogiendo el ascensor… pero además haciendo deporte. El que tú quieras, el que más te guste, pero sin engañarte.

Por media hora caminando no vas a quemar un bocadillo. Para perder peso, o perder más peso con el deporte, tienes que hacerlo con una cierta energía.

Si estás comiendo bien, estás comiendo poco y te estás moviendo, pero no pierdes peso, ¡no te engañes, ni te dejes engañar! No busques soluciones milagrosas, ni pienses que algo falla en tu cuerpo.

Simplemente tienes que comer bien, un poquito menos y moverte un poco más, con más energía. Verás como los kilos van bajando, porque todo el mundo puede perder peso, ¡y tú también!

Hay mucho contenido este blog con trucos y consejos. Pero al final todo se reduce a crear un hábito de vida saludable:

Pin It on Pinterest

Share This