El número de niños con problemas de sobrepeso y obesidad está aumentando en todo el mundo de forma alarmante.
En Estados Unidos este problema afecta ya al 30 % de los niños y esta epidemia ha llegado ya en España en dónde se barajan cifras de obesidad y sobrepeso infantil que van del 30% al 50%.
Contenido del post:
Como se diagnostica si un niño tiene obesidad o sobrepeso
En general se define como obesidad infantil cuando el índice de masa corporal en relación con la edad (IMC-por-edad) sobrepasa el percentile 95 y se define como sobrepeso cuando este IMC-por-edad sobrepasa el percentile 85.
Evidentemente, el diagnóstico lo debe realizar un médico ya que pueden influir otros factores como la estatura del niño, por lo que este método es un mero indicador de como es el peso del niño en relación con el de otros niños de su edad.
Riesgos asociados a la obesidad infantil
Los niños con obesidad tienen un 70% más de probabilidad de seguir siendo obesos cuando sean adultos.
Además, tienen más riesgo de padecer enfermedades hasta ahora muy poco frecuentes en los niños como:
- Enfermedad cardiovascular
- Aumento del colesterol
- Hipertensión arterial
- Diabetes tipo 2
- Apnea del sueño
- Cáncer
- Problemas ortopédicos
Aparte de estas enfermedades, los niños con obesidad padecen con más frecuencia discriminación social, bulling y problemas de autoestima.
Cómo evitar la obesidad infantil
Papel de la familia
El tratamiento de la obesidad en los niños y en los jóvenes debe ser tratada de manera distinta a como se trata en los adultos.
Es fundamental que en dicho tratamiento se englobe a toda la familia. Aquello que se supone que es bueno para tu hijo deber ser bueno para el resto de la familia.
No puedes pretender que tu hijo coma algo que los demás no comen ni que él por su sobrepeso tenga menús diferentes. Es importante que el niño no crea que la discriminación o la crítica hacia él existen también en su casa.
Dieta
Un niño no debe hacer dieta. Debe comer lo que le corresponde por su edad. Ni más, ni menos. Evita hablar de su peso y de las calorías. Los alimentos sanos son necesarios para su salud independientemente de su peso.
Comiendo lo que necesita irá perdiendo peso a medida que va creciendo. Es más importante que coma sano a que coma poco. Es evidente que para reducir calorías lo ideal es que la comida no se cocine con mucho aceite y que los hidratos (arroz, pasta, pan, patatas) se usen de acompañamiento y no como plato principal.
Pero lo más importante es reducir al máximo los caprichos innecesarios haciendo entender al menor que no son buenos para su salud.
Actividad física
Otra cosa fundamental además de la dieta, es la actividad física que el niño o el adolescente realicen.
Hay que evitar en lo posible hábitos de vida sedentarios y fomentar la práctica de cualquier deporte y/o juegos en los que los niños se muevan.
El ejercicio no debe convertirse en una obligación. El niño o el joven deben ver el deporte como un modo de entretenimiento. Por ello son adecuadas todas las actividades que el menor pueda realizar acompañado de otros niños o adolescentes de su edad.