La semana pasada, concretamente el 26 de octubre de 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS) a través del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC)*, nos advierte que un consumo excesivo de carne roja y especialmente de carne procesada aumentan la probabilidad de padecer cáncer.
Contenido del post:
Aclaraciones previas
La OMS no ha descubierto nada nuevo
La OMS ha incluido el consumo excesivo de carne roja y de carne procesada entre los factores que predisponen a padecer cáncer.
Esto lo ha decidido tras revisar más de 800 estudios científicos serios, realizados a lo largo de los últimos 20 años, en los que se analizaba la probabilidad mayor o menor de tener cáncer en función de la cantidad de carne consumida.
La OMS ha recalcado algo que ya se había demostrado previamente
Aunque hace años que, los profesionales de la salud, venimos advirtiendo del riesgo de un consumo excesivo de carne para el desarrollo del cáncer, la OMS lo ha hecho de forma oficial tras revisar exhaustivamente todo lo publicado sobre el tema. Sin ideas preconcebidas y sin dar nada por cierto. Esto es lo que actualmente denominamos Medicina Basada en la Evidencia.
Conclusiones
Carne roja
Los expertos concluyeron que el consumo excesivo de carne roja puede tener un efecto carcinógeno sobre las personas o lo que es lo mismo, aumenta la probabilidad de padecer cáncer, especialmente el de colón y en menor medida de páncreas y de próstata.
Se entiende por carne roja la que proviene del músculo de los mamíferos: buey, ternera, cerdo, cordero, cabra o caballo.
Se considera un consumo excesivo comer más de 100/200 g por persona y por día de esta proteína.
En un estudio concreto se observa que el consumo de 100 g al día de carne roja aumenta en un 17% el riesgo de padecer cáncer de colón.
Carne procesada
Los expertos concluyeron que el consumo excesivo de carne procesada es carcinógena para los humanos o lo que es lo mismo, aumenta la probabilidad de padecer cáncer colorectal.
Se entiende por carne procesada la que se ha transformado por salazón, curado, fermentación, ahumado u otros procesos para mejorar su sabor o su conservación. La mayoría de las carnes procesadas provienen del cerdo, pero también pueden contener otras carnes rojas, aves, despojos, vísceras o subproductos cárnicos tales como la sangre. Se incluyen en este tipo de carne la carne en lata y todas las preparaciones o salsas prefabricadas a base de carne.
Hay menos datos relativos a lo que se considera un consumo excesivo de este tipo de preparados pero en el estudio nombrado anteriormente, observan que consumir más de 50g por persona y por día de carne procesada aumenta en un 18% el riesgo de padecer cáncer de colon.
Recomendaciones
Aunque, como recalcan las estadísticas, el riesgo de padecer un cáncer de colón es relativamente bajo, la incidencia de este cáncer está aumentando progresivamente en los países desarrollados como España.
Una de las razones de este aumento de incidencia pueden ser nuestros hábitos alimenticios en los que cada vez se consumen menos alimentos ricos en fibra y más productos procesados.
Como nos recuerda la Organización Mundial de la Salud casi 5 de cada 10 personas con cáncer podrían haberlo evitado llevando un estilo de vida saludable.
Por lo tanto, si quieres reducir la probabilidad de tener cáncer, cuídate , sigue una dieta variada rica en alimentos vegetales y reduce el consumo de carne y derivados.
*El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) forma parte de la Organización Mundial de la Salud. Su misión es coordinar y realizar investigaciones sobre las causas del cáncer en humanos, los mecanismos de la carcinogénesis, y desarrollar estrategias científicas para el control del cáncer. El Centro está involucrado en la investigación epidemiológica y la investigación de laboratorio, y en la diseminación de información científica a través de publicaciones, reuniones, cursos y becas.